"En realidad ella no era guapa ni era bonita, no exactamente.
Ella te aceleraba el pulso de puro deseo desde el mismo momento en el que la mirabas a esos ojos de niña de color avellana. Era una mujer que hacia que te volvieras loco, era perturbadora, desgarradoramente sexy, exquisita, capaz de hacerte sacar el peor de los vicios y sin dejar de mirarte con esa carita de ángel.
Era verdaderamente diferente, era algo más. Mucho más.. "
jueves, 23 de julio de 2015
3 años maravillosos
sábado, 18 de julio de 2015
16
Y una vez más me pregunto
cómo en un espacio tan grande
(el que hay de mis caderas a tu sonrisa)
soy capaz de sentir tu respiración.
Y de nuevo encuentro la respuesta:
y es que si tu sonrisa no estuviera
mis caderas jamás tendrían la tentación de acercarse a ti,
y mi piel no conocería ningún escalofrío
y mis ojos no serían capaces de brillar con tanta intensidad.
Pero,
como en la mayoría de los casos,
tu sonrisa no se da cuenta de esas cosas,
y por eso yo sigo aquí,
y tú jamás te preguntas por mí.
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